Natasha Meeks era gerente de una tienda de repuestos para automóviles y demandó a su antiguo empleador y gerente por acoso sexual y otras irregularidades en virtud de la FEHA. El jurado emitió un veredicto a favor de los acusados. MLG apeló y ganó el derecho a un nuevo juicio basado en los fallos probatorios perjudiciales del tribunal de primera instancia. Esta decisión publicada es una de las principales decisiones “yo también” en California que permite a los demandantes que demandan por acoso sexual presentar pruebas de acoso sexual a empleados no parte por parte del mismo presunto acosador fuera de la presencia del demandante.
La Corte Suprema de California denegó la petición de revisión de los acusados.
